Hacia ciudades inteligentes,
sustentables e inclusivas.

En el webinar “América Latina y el Caribe hacia una región inteligente y cibersegura, con datos”, especialistas de los procesos de digitalización más importante de la región mostraron el camino a seguir para poder avanzar de manera transparente y ordenada. Conoce más acá.

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) es uno de los actores fundamentales para bajar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en América Latina y lograr una justa y rápida transición a la sustentabilidad. En ese sentido, además de invertir en la materia también genera constantemente espacios de debate en torno a las distintas experiencias surgidas en el continente. 

En esta oportunidad, se trató del webinar que han organizado bajo el nombre de “América Latina y el Caribe hacia una región inteligente y cibersegura, con datos”, donde se mostraron los ejemplos de ciudades de Argentina, Uruguay y Brasil en torno a la digitalización de la administración. 

“La pandemia del COVID-19 contribuyó a acelerar la transformación digital de las ciudades de América Latina y el Caribe. La generación masiva de datos (Big Data), las herramientas de análisis y la inteligencia artificial tienen el potencial de resolver grandes problemas urbanos, apoyar la toma de decisiones, y la formulación de políticas públicas basadas en la evidencia”, explicaron desde el organismo. 

Organizado por la Red de Ciudades, distintos expertos líderes y gestores de los procesos relacionados a la ciberseguridad y transformación digital con uso de datos para desarrollar ciudades más inteligentes, expresaron sus casos puntuales y sus desafíos. 

María Camila Uribe, presentadora del evento, aseguró: “Queremos ayudar a la región a construir ciudades más sostenibles y capaces de afrontar de manera eficiente los embates del cambio climático como también la transición hacia la movilidad”.

Además, resaltando la importancia del trabajo post pandemia durante los últimos meses, reconoció: “En la red de ciudades sabemos que la pandemia contribuyó a la transformación digital en las ciudades y supuso grandes retos y oportunidades para generar mejores espacios para los ciudadanos. El proceso de recuperación ha dado lugar a la generación masiva de herramientas de análisis o IA para resolver problemas urbanos”

Alejandra Torres |  Secretaría de Planeamiento, Modernización y RRII (Córdoba, Argentina)

Uno de los ejemplos, destacado por el BID y recomendado para el manual de las buenas prácticas por su cercanía a la ciudadanía y la implementación del Primer Fondo Startup del continente, es el caso de la ciudad de Córdoba. 

Con Alejandra Torres como coordinadora del proceso inteligente del municipio, han logrado posicionarse como uno de las administraciones de Argentina con una mayor cantidad de trámites digitales para poder resolver con practicidad las burocracias estatales. 

“Pudimos ver, dentro de todo lo que había para trabajar, que había muy baja eficiencia del municipio a la hora de realizar trámites cotidianos. Por eso trabajamos en base a un libro del BID que se llama ‘El Fin del Trámite Eterno’, explicó la Secretaria de Planeamiento, Modernización y RRII de Córdoba en relación a este proceso. 

Además, explicó que en el país “la digitalización era un proceso prácticamente ausente y eso hacía que el ciudadano concurriera en varias oportunidades para hacer los trámites en un promedio de 4,8 horas para completar un trámite”

La intención del gobierno y del intendente Martín Llaryora es convertir a la ciudad en uno de los focos inteligentes más importantes de la región y para ello Torres explicó: “Para ir a una ciudad inteligente uno tiene que tener liderazgo bien marcado y el apoyo del líder de la jurisdicción durante todo el proceso porque son numerosos los problemas que uno enfrenta”. 

Por eso, para afrontar este problema tuvieron que cambiar las leyes vigentes y modificarlas por unas que permitan el avance de la digitalización, como la adhesión a la Ley Provincial n° 10.618.

Por otra parte, frente a las consultas recibidas por parte de municipios vecinos donde alegaron que la falta de financiamiento es un impedimento para avanzar hacia ciudades inteligentes, Torres respondió: “No es tanto el presupuesto sino la eficiencia de cómo uno utiliza ese presupuesto”. 

Para más detalles de la estrategia local de Córdoba, podes leer esta entrevista exclusiva de Utopía Urbana a Alejandra Torres

Cristina Zubillaga- CEO en PMA y colaboradora en gestión de ciudades inteligentes

Otro de los ejemplos latinoamericanos propuestos por el BID fue el caso de la cd capital uruguaya Montevideo, que se ha sumergido dentro del plan integral de Agendas Digitales que ya desde el año 2005 ha implementado la idea de Agenda de Gobierno Electrónica

“A nivel país pudimos tener muchas instancias de participación con ideatones, hackatones y eventos además de talleres y laboratorios para poder meter e incorporar las propuestas ciudadanas al plan de la ciudad. Muchas veces la palabra de los vecinos no se oye y son ellos los que mejor pueden ayudarnos a encontrar las soluciones”, explicó Zubillaga. 

Con el desarrollo de Inteligencia Artificial (IA) y de Internet de las Cosas (IoT) han ido incorporando los distintos ODS a su plan nacional, entendiendo que la necesidad de administrar de manera ordenada también implica un compromiso ambiental. “Al concepto de ciudad inteligente le sumamos el de sustentable, porque el objetivo también es que las personas puedan mejorar su calidad de vida”. 

Para ello desde el plan buscan poder generar oportunidades de empleo asociadas al sector verde y así poder “contribuir a un mundo mejor”. Otro de los ejes fundamentales es la gestión de los residuos y su separación desde orígen para poder generar un valor a partir de lo comúnmente denominado basura. 

Guilherme Bayma -Gerente General del Centro de Evaluación de Políticas Públicas y Ciencia de Datos en Prefeitura do Recife

Por parte del sector brasilero, Guilherme Bayma fue el encargado del desarrollo de políticas inteligentes de la ciudad de Recife, quien admitió que desde hace años “estamos sometidos a una transformación digital, es un proceso en marcha con muchos cambios importantes y estamos con un plan estratégico a 2024 que incluye una transformación digital en todos los trámites”, aseguró Bayma, 

El funcionario, que tiene el rol de Gerente General del Centro de Evaluación de Políticas Públicas y Ciencia de Datos en Prefeitura de Recife, explicó que tienen una importante política de datos abiertos que les ha permitido generar pilas de información que son utilizados para mejorar la calidad del servicio de los ciudadanos. 

Para eso, en sus propias palabras, crearon el Campo de Evaluación de políticas Públicas para mejorar la calidad de nuestras medidas generando y compartiendo conocimiento para tomar decisiones basadas en la evidencia y tomar decisiones estratégicas”. 

Al igual que el resto de los ejemplos latinoamericanos Bayme dio a conocer la importancia de generar una transparencia pública para impulsar la participación ciudadana en las perspectivas actuales. 

Para ello realizaron una especie de inventario de los problemas que identificaron en la ciudad basados en las experiencias y vivencias de los ciudadanos, poniendo especial atención en los espacios de comunicación y gobierno abierto. En esa búsqueda son tenidos en cuenta los datos recopilados del trabajo territorial, generalmente llevado a cabo por los laboratorios de innovación social o comunas vecinales. 

“Estos diagnósticos nos dan la oportunidad de tomar decisiones asignar los recursos de forma diferente y ponerlos en los lugares que más lo necesitan. También tenemos una gran base de datos sobre los residuos municipales, algo que nos permite avanzar sobre su gestión”. 

Este diagnóstico les permite conocer la información de hasta cuántas habitaciones hay por cada hogar y cuántas personas habitan los lugares, que aunque parezca un dato invasivo a la privacidad, el objetivo que esconde es poder avanzar en la inversión en urbanización para mejorar la calidad de vida y los espacios de los habitantes. A esto lo denominó como la formulación de políticas públicas basadas en la evidencia. 

Marco Emilio Sanchez Acevedo – Abogado escritor de la “Guía De Ciberseguridad para Ciudades Inteligentes” del BID. –

Comprendiendo la necesidad de entender los procesos de gestión pero también de las limitaciones legales y la aparición de los derechos digitales de las personas, desde el BID son conscientes de que el proceso de digitalización debe darse de manera ordenada y respetuosa con la información de las personas. 

Para ello convocaron a Sánchez quien explicó: “Para transformar las ciudades de América Latina debemos pensar en sus derechos. Particularmente en los derechos digitales donde aparece la seguridad del ciberespacio. Es tan importante que todos estos proyectos deben garantizar la ciberseguridad y la comprensión de los datos”.

Al existir datos que son públicos y  otros que son privados, de la misma manera que los hay personales y no personales, la correcta utilización de estos datos es lo que permite a los gobiernos ser transparentes o no. 

“Hay que evitar los riesgos que generan el uso de datos. Usar datos en las ciudades nos hace enfrentarnos a riesgos que antes no teníamos y sus riesgos pueden ser de distinta categoría. Algunos muy bajos y otros muy altos”. 

Para ello el hombre avisó a los distintos funcionarios y al público engendrar sobre la importancia de tomar medidas que protejan estos datos, como pueden ser las legislaciones que reconozcan los derechos digitales de las personas y su privacidad. Además “hay que tener medidas humanas, personal capacitado para resolver estas situaciones. Pero también necesitamos medidas administrativas y la capacidad técnica para garantizar la protección de los datos”. 

Además, más allá de la utilización de los datos también es necesario estar cubierto ante cualquier ataque digital que pueda vulnerar los derechos de los ciudadanos: “Hay ataques informáticos en todo el mundo. Usar tecnologías pero enfrentar los riesgos para cuando llegue nuestro momento. Hay que conocer los impactos que pueden generar no solo para la reputación de una organización sino tener un impacto para los derechos de los ciudadanos”, concluyó el especialista. 

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