La sostenibilidad es un desafío ineludible para las industrias en el siglo XXI, y el sector agroindustrial no es la excepción. En este contexto, el Molino Campodónico, ubicado en la ciudad de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires (Argentina) emerge como un referente nacional en la producción de harina bajo prácticas sustentables, demostrando que es posible combinar tradición, innovación y compromiso ambiental.
Desde su fundación, Molino Campodónico se ha destacado por producir harinas de alta calidad, pero en los últimos años ha dado un paso adelante al incorporar tecnologías y procesos que minimizan su impacto ambiental. Conversamos con Alejandro Campodónico, Presidente de la empresa, quien lo resume así:
“Nuestro objetivo es claro: ser un molino que no solo abastezca al mercado, sino que lo haga de manera responsable, cuidando el medio ambiente y fomentando prácticas sostenibles en toda la cadena productiva”.
Este enfoque les permitió trabajar de manera integral en toda la cadena de valor e incorporando tecnología y una clara centralidad en el consumidor. Al respecto, Aleandro agrega: “Esto nos permitió abarcar toda la cadena, desde el cultivo del trigo hasta el producto final, y responder a una demanda del mercado que exige transparencia. Implementamos sistemas como códigos QR que permiten al consumidor rastrear el origen de la harina y sus propiedades”.
El Molino Campodónico ha implementado diversas estrategias para minimizar su impacto ambiental, abarcando desde la utilización eficiente de energía hasta la reducción de desechos en su cadena de producción. Uno de los pilares de esta transformación ha sido la instalación de sistemas de monitoreo que optimizan el consumo de recursos, como agua y electricidad, junto con la incorporación de energías renovables en sus operaciones.
Foto: Portal Info Cronos
La economía circular también juega un papel clave en el molino, evidenciada en la gestión de los subproductos generados durante el procesamiento del trigo. En lugar de desecharlos, estos se reutilizan en actividades como la producción de alimentos para animales, cerrando el ciclo productivo. En palabras de Alejandro Campodónico: “Queremos que cada parte del proceso tenga un impacto positivo. Desde el aprovechamiento de los subproductos hasta la implementación de energías limpias, buscamos marcar la diferencia en cómo se produce la harina en Argentina”.
Como parte de este compromiso, el molino ha implementado normas internacionales como la ISO 9001 y avanza hacia estándares más específicos, incluyendo la FSC 22.000, que garantiza la inocuidad de sus productos. Campodónico subraya: “Nos propusimos incursionar en el mercado de harinas orgánicas. Fuimos los primeros en Argentina en certificar harinas orgánicas industriales, lo cual nos posicionó como pioneros en este rubro”.
Además, el molino apuesta por el reciclado, clasificando sus residuos y colaborando con empresas como Amiplast, que se encargan de reutilizar plástico reciclado. “Incluso analizamos detalles como el uso de papel de bagazo de caña de azúcar para reducir nuestro impacto ambiental”, agrega Campodónico.
El compromiso con la sustentabilidad alcanzó un nuevo nivel con su decisión de convertirse en una Empresa B certificada. Este proceso implicó modificar su estatuto y reafirmar su propósito empresarial, garantizando prácticas responsables y un impacto positivo en la comunidad. Según Campodónico, “asumimos el desafío de certificar no sólo nuestras prácticas, sino también nuestro propósito”.
¿Qué hace ser a Molino Campodónico una Empresa B certificada?
Fuente: https://molinocampodonico.ar/sustentabilidad/
LA INNOVACIÓN COMO MOTOR DE CAMBIO
Además de su compromiso ambiental, Molino Campodónico ha invertido en tecnología para garantizar la calidad y seguridad de sus harinas, manteniendo los más altos estándares internacionales. Estas innovaciones no solo mejoran la eficiencia del proceso productivo, sino que también aseguran que el producto final sea saludable y competitivo en el mercado global.
Con un enfoque en la trazabilidad, el molino utiliza herramientas digitales para garantizar que cada bolsa de harina tenga un recorrido claro y transparente, desde el campo hasta la mesa del consumidor. Este enfoque refuerza la confianza de los clientes y agrega valor a los productos, que son reconocidos tanto en Argentina como en el exterior.
IMPACTO SOCIAL Y ECONÓMICO
La sustentabilidad no se limita a lo ambiental; también tiene un impacto significativo en lo social y económico. Así lo demuestra su último reporte de sustentabilidad 2023. Según el mismo se plantean claramente 5 líneas de acción bien definidas e integrales: gobernanza; seguridad alimentaria e innovación; gestión responsable del ambiente; bienestar del ambiente de trabajo; y , participación y desarrollo de la comunidad.
Como parte de esta estrategia, y con foco en el último eje, Molino Campodónico trabaja estrechamente con productores locales, promoviendo prácticas agrícolas responsables y asegurando un comercio justo. Este modelo fortalece las economías regionales y crea empleo, contribuyendo al desarrollo sostenible de la comunidad platense y sus alrededores.
Por otra parte, el especialista aseguró: “En cuanto a nuestra relación con la comunidad, siempre hemos tenido un fuerte compromiso. Realizamos pasantías con universidades, prácticas profesionalizantes con colegios industriales y asistimos a más de 30 instituciones, como asilos, hospitales, merenderos, comedores y escuelas. Todo esto forma parte de nuestra razón de ser y de nuestro vínculo con la comunidad de la que provenimos”.
“Estamos convencidos de que no se trata solo de producir harina, sino de hacerlo con un enfoque social. Trabajamos codo a codo con los productores y empleados para garantizar un impacto positivo en cada nivel de la cadena de valor”, destacó Campodónico.
Ejes básicos de la estrategia de sustentabilidad
Fuente: Reporte de Sustentabilidad 2023 de Molino Campodónico
UN REFERENTE PARA EL FUTURO
La transición hacia un modelo de producción más sostenible posiciona al Molino Campodónico como un ejemplo a seguir en la industria agroalimentaria argentina. En un mundo donde los consumidores demandan productos que respeten el medio ambiente, la empresa demuestra que la tradición y la sostenibilidad pueden ir de la mano.
En palabras de Alejandro Campodónico: “Nuestra misión no es solo producir harina de calidad, sino hacerlo de manera que cuidemos los recursos del planeta para las generaciones futuras. Creemos que este es el camino hacia una agroindustria más justa y sostenible”.
A medida que Argentina enfrenta los desafíos de un sector agroindustrial en transformación, iniciativas como las de Molino Campodónico son un recordatorio de que es posible liderar el cambio desde la acción local, con impacto global.
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