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En medio de la rápida expansión de la Inteligencia Artificial, la pregunta sobre el uso del Chat GPT en las escuelas se ha vuelto crucial. Mientras las instituciones académicas han navegado por las aguas turbulentas de la transformación digital, el especialista en tecnología e Inteligencia Artificial, Santiago Bilinkis, emerge como una voz destacada en este debate con su opinión 

En el marco de la creciente expansión de la Inteligencia Artificial, se han puesto en duda algunos conceptos básicos educativos, sobre todo dentro de las instituciones académicas. Un sistema con una mirada sesgada en lo material y en lo escrito no ha permitido ver que a sus ojos algo está sucediendo: un mundo digital que se ha expandido a gran escala. 

La silenciosa y sigilosa expansión de la era digital ha provocado que muchos de los principales académicos a nivel mundial “durmieran una siesta”. Es que a sus ojos era evidente la transformación tecnológica. De los primeros celulares a las notebooks y a los relojes inteligentes. Todo esto siempre fue visto como un palo en la rueda de las escuelas. Sin embargo, con el advenimiento de la pandemia de Covid-19, las nuevas y disruptoras tecnologías empezaron a tomar un papel crucial

Ya no son parte secundaria de la historia. Ya que durante el encierro ocuparon un rol preponderante. Sin la tecnología no se hubiera podido dictar clases por ejemplo. Sin embargo hoy parece haber trascendido las paredes de las aulas con la llegada de los modelos de lenguaje como el Chat  GPT.

Según el propio Chat GPT, que fue consultado para este artículo, se describe asimismo como: “Una avanzada tecnología de procesamiento de lenguaje natural desarrollada por OpenAI. Se basa en el modelo GPT-3.5, que es capaz de comprender y generar texto de manera contextualmente coherente. Este sistema utiliza el aprendizaje profundo para analizar grandes cantidades de datos lingüísticos, lo que le permite responder preguntas, completar oraciones y generar texto nuevo de manera inteligente”.

Este modelo ha estado en boca de docentes y educadores en los últimos años por ser percibido como una amenaza a la capacidad de interpretación de los alumnos, sobre todo en los que tienen edad de primaria y secundaria. Pero…¿qué tan lejos puede llegar la tecnología en todo este asunto? ¿Terminará tomando el control de la educación del futuro? 

Alguno de estos interrogantes busca resolver el especialista en tecnología e Inteligencia Artificial, Santiago Bilinkis en su clase sobre “El impacto de la IA y Chat GPT en la educación”. Vale aclarar que Bilinkis es experto en tecnología, emprendedor y autor de varios libros en la temática digital como “Guía para sobrevivir al presente” y “Pasaje al futuro”.

¿EDUCACIÓN EN RIESGO?

En encuestas realizadas por el propio especialista se  dio a conocer que una gran parte de la población tiene conocimiento sobre la existencia de la Inteligencia Artificial y modelos de lenguaje como el Chat GPT. Sin embargo, esa misma mayoría cree que es poca la información que se brinda en la educación al respecto. 

En ese sentido Bilinkis explicó que estamos ante un modelo que si bien no es peligroso para la humanidad, si lo es para las escuelas. “La IA en las escuelas no solo es una realidad que no tiene vuelta atrás sino que es cada vez más transformadora”, aseguró el especialista. 

En la era actual de la información instantánea, el Chat GPT emerge como una herramienta educativa que desafía la forma tradicional de evaluar en las escuelas. Antes de la omnipresencia de internet, la memoria y el acceso a datos fácticos eran cruciales, requiriendo visitas a bibliotecas y búsquedas laboriosas. Sin embargo, con la llegada del Chat GPT, la dinámica cambia. La prohibición inicial en algunas escuelas reflejó la resistencia al cambio, pero otras instituciones optaron por adaptarse.

Este avance plantea cuestionamientos sobre la relevancia de evaluar basándose en datos fácticos de memoria. El Chat GPT desafía el paradigma de una única respuesta correcta, otorgando a los estudiantes la habilidad de obtener un 6 dentro de este modelo de evaluación.

Sin embargo, la clave no radica en resistir el cambio, sino en aprender a utilizar estas herramientas de manera efectiva. La capacidad de formular preguntas inteligentes se convierte en esencial, promoviendo la calidad en los trabajos escolares. “Hoy podemos aprobar todos sin aprender nada. Pero no es lo que queremos. Queremos formar personas con pensamiento crítico, cada vez más pensantes. Eso no lo va a reemplazar la IA, explicó Bilinkis. 

La resistencia al Chat GPT puede considerarse una reacción defensiva, pero el verdadero desafío está en encontrar una solución que no retrocede a tiempos anteriores. La escuela debe adaptarse y proponerse desarrollar la habilidad de utilizar estas tecnologías, reconociendo que la educación debe evolucionar con los avances tecnológicos. 

“Aprender a usar Chat GPT es necesario. Va a estar disponible. Aprender a usar estas herramientas va a ser crucial en esta matriz. Tiene que estar entre las cosas que la escuela se proponga desarrollar. La clave es aprender a preguntar. Preguntar bien y haciendo estos procesos permite hacer trabajos de una calidad excelente”, aseguró Bilinkis. 

La motivación se convierte en un factor crucial en este proceso de cambio. Los estudiantes necesitan sentir que lo que aprenden tiene un propósito. La educación no debe limitarse a aprobar exámenes sin aprender, sino a formar individuos pensantes y críticos. En este panorama, la IA no reemplaza la necesidad de pensar, sino más bien desafía a repensar cómo enseñamos y evaluamos en las escuelas, buscando un equilibrio entre la tecnología y el desarrollo del pensamiento crítico en la próxima generación.

CAMBIAR EL MODELO EDUCATIVO 

En el marco de la revolución digital, el especialista en IA y tecnología, Santiago Bilinkis, destaca la necesidad de incorporar diversas habilidades en el ámbito educativo, reconociendo que «hay un montón de cosas para agregar en las escuelas». Entre estas, Bilinkis subraya la importancia de mejorar las habilidades de presentación oral, señalando que «somos bastante malos presentando en público; nos produce intimidación y es algo que se enseña poco». Enfatiza que, aunque pasar al frente solía ser temido, otras culturas no adoptan la misma perspectiva y la vida cotidiana demanda esta habilidad.

Además, Bilinkis resalta la relevancia del «manejo de finanzas personales», sugiriendo que todos enfrentamos situaciones diarias donde debemos analizar precios y decidir si conviene pagar en cuotas, y señala la carencia en habilidades de ahorro. Estos aspectos, según Bilinkis, son fundamentales para la vida cotidiana y deberían integrarse en el currículo educativo.

Otro punto crucial que destaca es el «uso de redes sociales». En su opinión, es esencial que las escuelas dediquen tiempo a comprender el funcionamiento de estas plataformas y enseñar a los estudiantes cómo relacionarse adecuadamente en línea, identificando «cuáles son buenos usos y cuáles no». En un mundo cada vez más interconectado, Bilinkis subraya que estas habilidades son esenciales para el desarrollo integral de los estudiantes. Sobre la relación con las redes sociales, Bilinkis ha profundizado en diversas entrevistas, intervenciones radiales e incluso en un evento reciente en Tecnópolis el que Utopía Urbana estuvo presente, cuando Santiago planteaba el concepto de hackeo de la atención que las redes imponen sobre los usuarios.

En consonancia con estas ideas, la educación del siglo XXI se enfrenta al desafío de adaptarse a las demandas cambiantes de la sociedad digital, integrando habilidades prácticas y relevantes para preparar a los estudiantes para un futuro que requiere más que la mera memorización de datos. “Hoy los chicos piensan que lo que aprenden en el colegio no sirve. Si los chicos opinan que no sirve quizás no sirve. El momento más crucial del aprendizaje es la motivación y la clave para que se motiven es que ellos sientan que lo que están aprendiendo les sirve de algo”, concluyó. 

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