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Tres empresas españolas se unieron en un proyecto de movilidad sustentable para impulsar la llegada de los teledirigidos al país. Son considerablemente más lentos que los aviones tradicionales pero consumen un 90% menos. Se estima que para el 2030 podrían ser totalmente eléctricos.

La urgencia por avanzar en la transición hacia una movilidad sustentable y sin emisiones de carbono ha generado múltiples ideas innovadoras a base de energías alternativas a lo largo del mundo. Muchas de ellas destinadas al transporte aéreo, uno de los máximos contaminantes a nivel mundial por la gran cantidad de combustible necesaria para mover a los aviones. 

En Utopía Urbana ya hemos repasado alguna de estas alternativas como por ejemplo las Aeronaves Eléctricas de Despegue y Aterrizaje Vertical (eVTOL) utilizadas principalmente para el traslado de paquetes y mercancías, pero también para el de pasajeros. La llegada de las eVTOL ha significado un gran avance para la movilidad aérea y su descarbonización. Francia, China, Arabia Saudita y Orlando (Estados Unidos) son algunos de los casos más conocidos. 

Sin embargo, no se trata de el único avance en la materia, ya que recientemente se ha presentado la opción de utilizar Teledirigibles, que si bien son considerablemente más lentos, reducen el consumo en un 90% en relación con los aviones tradicionales

Uno de estos casos es el de la empresa Air Nostrum, que se ha vinculado al proyecto de movilidad sostenible Airlander 10 de la reconocida empresa británica Hybrid Air Vehicles (HAV) que busca impulsar el modelo con el mismo nombre del proyecto, pensado para ser una alternativa ecológica y versátil. 

Desde la empresa buscan conseguir trabajar sobre este modelo y extender los límites de su sostenibilidad logrando un modelo totalmente eléctrico para el año 2030, algo que de momento resulta impensado. El acuerdo es que la primera aeronave pueda estar operativa, después de haber obtenido su certificación, en 2026, para luego seguir entregando nuevas unidades de una forma escalonada durante los siguientes cinco años.

Una de las ventajas de esta movilidad en comparación de los aviones ya conocidos es su adaptabilidad a los diversos territorios a visitar. Al ser de dimensiones considerablemente más pequeñas que los modelos tradicionales, puede aterrizar en islas o ciudades que no tengan aeropuertos

“Exploramos todas las vías que se nos presentan para reducir la huella de carbono. Es algo que venimos haciendo desde hace muchos años. El Airlander 10 bajará drásticamente las emisiones y por eso hemos alcanzado este acuerdo con HAV. La sostenibilidad, por suerte para todos, ya es un hecho irrenunciable en el día a día de la aviación comercial y acuerdos como este son una forma efectiva de alcanzar los objetivos de descarbonización previstos en la iniciativa legislativa ‘Fit for 55’”, expresó el presidente ejecutivo de Air Nostrum, Carlos Bertomeu. 

Esta prueba, cabe destacar, será realizada en cielo español y buscará convertirse en una alternativa sostenible a los viajes de media distancia que hay entre las distintas ciudades y distritos españoles. Por ejemplo, respetando la velocidad media de crucero (130km/h), podría conectar Madrid a Sevilla en unas 3 horas. 

Según explicaron desde la empresa, este tipo de vehículos necesita de una sustancialmente menor cantidad de combustible porque funciona mediante otros mecanismos de trabajo aerodinámico para conseguir estabilidad en el aire (similar al de los modelos tradicionales, un sistema de gases para ganar altura (como un globo aerostático). En lo que respecta al movimiento horizontal lo logrará mediante un sistema de rotores.

Uno de los que conoce bien el modelo es Tom Grundy, director general de Hybrid Air Vehicles, quien expresó al respecto: “Airlander 10 está diseñado para ofrecer un futuro mejor de servicios aéreos sostenibles, permitir nuevas redes de transporte y proporcionar opciones de crecimiento rápido a nuestros clientes”. 

El hombre además está confiado de que este tipo de movilidad se pueda expandir a otros países del continente como parte de “un plan de ambiciosos mandatos para la descarbonización de los vuelos nacionales y de corta distancia”, sentenció. En comparación con los modelos tradicionales, la velocidad de crucero del Airlander 10 es de 130 km/h, es significativamente más baja. Sin embargo, el bajo consumo y la capacidad de realizar vuelos a bajo coste, propone una alternativa más que viable para los vuelos a corta distancia. ¿Te subirías a uno de estos teledirigidos?

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