Conocer la realidad de los diversos municipios del país en cuanto a su capacidad de desarrollo tecnológico, implica sin dudas un extenso trabajo de campo articulado entre diversos actores sociales, políticos y académicos. Todos estos actores convergen en el trabajo realizado por el Observatorio para el Desarrollo Digital de la Fundación País Abierto y Digital (PAD).
En esta oportunidad, el tercer informe que realizan desde la institución, recibió el nombre de “Desarrollo de un Ïndice de e-gobierno de los Municipios de Argentina”. Según explican en dicho documento,“el objetivo fue conocer, evaluar y difundir el estado actual del E-Gobierno de los principales municipios de la Argentina, y en base a ello poder inferir el nivel de madurez de la digitalización de dichas administraciones”.
En diálogo con Utopía Urbana, su presidente y ex Ministro Nacional de Modernización, Andrés Ibarra explicó: “El Observatorio genera papers o documentos que nos permiten trabajar en los distintos capítulos que son de nuestra especialidad. Estamos capacitando ciudades y provincias sumando formación para los empleados públicos. Es un tema importante porque buscamos darle herramientas a las personas que trabajan en el Estado para generar una mejora”.
El funcionario además expresó que la intención que tienen desde la Fundación es “aportar nuestro granito de arena ayudando a modernizar, implementar sistemas de gestión haciendo análisis que muestre la realidad de nuestro país”.
Con esta intención, desde PAD han elaborado el Índice Municipal de Servicios en Línea (IMSEL) con criterios múltiples, que captura el desarrollo del E-Gobierno mediante la evaluación de la información y los servicios proporcionados por los gobiernos.
Para ello relevaron unos 80 indicadores organizados en cuatro grandes grupos para poder observar la situación de cada gobierno en particular: (i) Funcionalidades tecnológicas; (ii) Provisión de Contenidos; (iii) Prestación de Servicios en línea; y (iv) Comunicación y Participación
Según expresaron en el informe del Observatorio, esta primera edición del indice de E Gobierno de los distintos municipios del territorio argentino sólo se abordaron las ciudades capitales de todas las provincias y aquellas con más de 100.000 habitantes, sin considerar la ciudad de Buenos Aires ni municipios de su conurbano, los cuales serán motivo de una próxima evaluación.
Por otro lado, buscan que los responsables de establecer las políticas públicas puedan tener una guia de fortalezas y debilidades para ver en qué vale la pena invertir tiempo y dinero para avanzar en un plan de desarrollo digital para los municipios, esperando que esto se traduzca en una estrategia nacional integral conformada por todos los actores intervinientes.
“Las ciudades son esencialmente una colección de redes humanas, sociales, económicas y culturales, y son entornos en los que se puede fomentar un sentido de pertenencia y unión, y en el que los procesos públicos que apoyan la cohesión y el desarrollo social pueden optimizarse y hacerse más eficientes y eficaces. Con este fin, se debe prestar mayor atención a la evaluación de la presencia en línea del gobierno local en las ciudades, un aspecto fundamental del E-Gobierno”, expresaron en ese sentido.
Resultados del informe
Con la intención de poner a disposición de las ciudades los resultados de este informe para permitirles avanzar hacia gobiernos más desarrollados tecnológicamente, desde el Observatorio para el Desarrollo Digital (ODD) elaboraron una serie de resultados en los que ordenaron a las 40 ciudades analizadas según su desarrollo en cuatro calificaciones:
- Grupo 1: aquellas ciudades que se encuentran en un Desarrollo Superior (> 80%);
- Grupo 2. Desarrollo Alto (> 60% y hasta el 80%);
- Grupo 3. Desarrollo Medio (> 40% y hasta el 60%);
- Grupo 4. Desarrollo Bajo (hasta el 40%), tanto para el análisis global como para el de cada uno de los 4 agrupamientos.
Dentro de estas categorías, sólo 2 alcanzaron la calificación Superior (Córdoba y Bahía Blanca); 11 municipios se encuentran en el nivel Alto, 23 en el nivel Medio y 4 en el Bajo.
Los que pudieron establecerse en un nivel superior estuvieron apoyados en una muy buena performance en todos los indicadores analizados, pero en especial en aquellos relacionados con la Tecnología aplicada, la Provisión de Contenidos y con la Participación y Compromiso.
En el segundo grupo de municipios se encuentran los 11 que han tenido un nivel alto de desarrollo respecto de los indicadores de Funcionalidad Tecnológica, y en menor medida en los indicadores de Provisión de Contenidos y de Prestación de Servicios en línea.
Con 23 municipios en total, la mayor cantidad se ubica dentro del desarrollo medio, lo que refleja que aún están en progreso. Es decir, si bien en determinadas áreas (generalmente para el eje de funcionalidades tecnológicas) tienen un rendimiento avanzado, no sucede lo mismo con las otras 3 áreas de análisis.
“Nos pareció importante entender qué tipo de acciones son requeridas para puntuar en cada uno de los 80 indicadores. Para esto, los clasificamos bajo 3 tipos, según sea que, por su naturaleza, la acción corresponda a: a) una Decisión Política (15 casos – por ejemplo información sobre la ejecución presupuestaria; los resultados de las adquisiciones; etc.); b) un Desarrollo Tecnológico (19 casos – por ejemplo turnos online; acceso online a expedientes electrónicos; etc.); c) una Gestión Interna (46 casos – por ejemplo la estructura organizativa del municipio; puntos wifi gratuitos; etc.)”, explicaron en el informe.
Es decir, en otras palabras, las ciudades fueron catalogadas según el grado de interacción que lograron conseguir entre la gestión municipal y sus ciudadanos, siendo las mejores puntuadas aquellas que son capaces de brindar excelencia en sus servicios, sin que eso signifique un largo proceso de gestión presencial por parte de las personas.
Tal como lo anticipó Ibarra en su momento, algo de eso empezó a suceder en el país con la réplica del modelo Estonio del “Once Only” que ya aplican algunas provincias e incentiva a que el propio Estado no solicite nuevamente documentaciones que ya tenga disponibles. Para conocer más sobre la implementación de este sistema en el país te invitamos a leer aquí.
Para realizar dicha evaluación, desde el ODD elaboraron el Indice de Servicio Local (LOSI), que establece diversos criterios de mediciones de los E-Gobiernos locales mediante la evaluación de la información y los servicios proporcionados por los gobiernos locales a través de sitios web oficiales, relevando 80 indicadores, que se organizan en los siguientes cuatro criterios: 1. Tecnología; 2. Provisión de Contenidos; 3. Prestación de Servicios en línea; y 4. Participación y Compromiso.
El objetivo de este trabajo fue conocer el estado actual de la presencia en línea de los principales municipios del país, y en base a ello poder inferir el nivel de madurez de la digitalización de dichas administraciones.
Conclusiones del informe
Desde Fundación PAD, a través del informe del ODD han destacado, en lineas generales, el trabajo estatal en cuanto a la digitalización realizada durante los últimos años. Sin embargo, aún hay una amplia cantidad de municipios que no han empezado a implementar la tecnología y la digitalización para ofrecer servicios ciudadanos.
En ese sentido, han explicado que se ven “diferencias entre los que han adoptado plataformas digitales para sus servicios y aquellos que aún los brindan de manera presencial”.
En general existe una performance muy buena en todo lo referido a Indicadores de Funcionalidades Tecnológicas (es decir, respecto de la manera en que se encuentran estructurados los sitios web y sus contenidos, cómo han sido diseñados) pero, respecto de la Provisión de Contenidos todavía no se ha alcanzado un grado de madurez elevado en este segmento. Son pocos los municipios que informan con detalle sus estructuras, los servicios que brindan, y los datos abiertos que ponen a disposición.
La decepción estuvo con los factores de Comunicación y Participación, lo que catalogaron como “la peor performance” y que además “pocos municipios han emprendido el camino de la participación ciudadana como parte de sus actividades principales. Y esto no depende del tamaño del municipio, ni del presupuesto anual”.