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El ingeniero Mehran Moalem presentó un increíble proyecto solar en el desierto de Sahara que podría abastecer energéticamente al planeta entero. Ocuparía 1,2% del desierto pero presenta grandes desafíos. Conoce de qué se trata esta idea

El planeta enfrenta grandes desafíos y la transición energética es uno de los más importantes. En ese contexto se vuelve imperante replantear el enfoque productivo y energético dando lugar a alternativas incluso impensadas, pero que pueden tener una gran relevancia mundial. Una de ellas propone algo que ya han pensado muchas personas y no es nada más y nada menos que convertir los grandes desiertos del mundo en grandes generadores de energía solar capaces de abastecer a todo el mundo. 

En el Sahara, el ingeniero Mehran Moalem, respaldado por un equipo de investigadores de la Universidad de California, Berkeley, ha presentado un proyecto revolucionario que podría cambiar el panorama energético mundial, según informó a Forbes. Se trata de la creación de una planta fotovoltaica gigantesca en el desierto del Sahara, con la capacidad de generar suficiente energía para abastecer a todo el planeta. Este estudio ha desencadenado un debate global sobre su importancia y viabilidad.

El estudio se basa en datos satelitales que miden la intensidad de la luz solar en el Sahara, revelando que esta región recibe un promedio de 2.600 kilovatios por hora por metro cuadrado al año. Con una extensión de 112.000 kilómetros cuadrados, la planta solar propuesta podría generar una impresionante cantidad de 17.,4 teravatios de energía, lo que equivale a alimentar todos los hogares del mundo. Para ello, según Mehran Moalem alcanzaría con esa planta fotovoltaica que ocuparía sólo 1,2% del territorio del desierto del Sahara, que constituye el desierto cálido más grande del mundo y el tercero de mayor dimensión después de la Antártida y el Ártico. 

VIABILIDAD ECONÓMICA E IMPACTO POTENCIAL

El proyecto planteado por Moalem, un ingeniero destacado y PhD en la Universidad de Berkeley (Estados Unidos), lógicamente tendría importantes implicancias porque en el medio se cruzan aspectos técnicos, económicos, financieros, productivos y hasta éticos, entre otros. Sin embargo, para operativizar este ambicioso proyecto algunas cuestiones básicas  a tener en cuenta son las siguientes. 

  • INVERSIÓN SIGNIFICATIVA: La construcción de una planta solar de esta envergadura requeriría una inversión monumental, estimada en alrededor de US$ 5 billones. Para llevarlo a cabo, se necesitarían miles de kilómetros cuadrados de paneles solares y una red de transmisión de energía que conecte el Sahara con los centros de demanda en todo el mundo. A pesar de los riesgos económicos involucrados, los investigadores sostienen que el potencial es extraordinario.
  • PROCESOS AMIGABLES AL AMBIENTE: Un aspecto que no se debe pasar por alto es que, aunque la energía solar es una fuente limpia, la producción de paneles solares no lo es tanto. El proceso de fabricación de estos paneles aún genera contaminación, un problema que necesita ser abordado a medida que avanzamos hacia un futuro más sostenible.

Asimismo, la construcción de una planta fotovoltaica en el Sahara tendría un impacto significativo en múltiples aspectos. Uno de ellos es el suministro global de energía, que avanzaría hacia una matriz renovable. Simultáneamente, reduciría la dependencia de los combustibles fósiles y disminuiría las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), lo que es esencial para combatir el cambio climático. Además, podría mejorar la calidad de vida y la economía de los países africanos, ya que la construcción y el mantenimiento de la planta solar crearían puestos de trabajo y contribuirían al desarrollo de infraestructura en la región.

DESAFÍOS A TENER EN CUENTA

Sin embargo, la construcción de una planta solar de esta envergadura también plantea desafíos significativos. La eliminación de vegetación y la construcción de infraestructura a gran escala podrían tener un impacto ambiental considerable, lo que subraya la necesidad de abordar estos problemas con responsabilidad y sostenibilidad.

En resumen, el proyecto propuesto por el ingeniero Mehran Moalem para crear una planta fotovoltaica en el desierto del Sahara es una idea ambiciosa con el potencial de revolucionar la forma en que el mundo obtiene su energía. Aunque enfrenta desafíos considerables, no se puede negar su importancia en la lucha contra el cambio climático y el avance hacia un futuro más sostenible. La comunidad global debe considerar cuidadosamente las implicaciones económicas, medioambientales y sociales antes de embarcarse en este viaje hacia la energía solar a gran escala en el Sahara.

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