¿Cómo es que el hombre blanco perdió el contacto con sus ancestros?, esa es la pregunta que se hacen las comunidades originarias argentinas de la actualidad. Es que la creación de las ciudades a gran escala no solo necesitó de grandes proyectos de diagramación e infraestructura, sino que significó un proceso largo e histórico de transformación de los espacios donde la urbanización destruyó en muchos casos la historia presente hasta ese entonces.
Campañas como la del Desierto y otras excursiones del siglo 19 significaron un gran avance para las ciudades en relación al “territorio ganado”, pero al mismo tiempo una gran destrucción de las comunidades originarias presentes. Esto no solo fue un cambio abrupto y una de las grandes matanzas del siglo, sino que también un precedente que abrió la puerta a una persecución sistemática a los pueblos originarios.
Hoy, casi 200 años después de estos sucesos, el colonialismo y las políticas republicanas llevaron a que la vida originaria y ancestral esté sometida a condiciones de vida sumamente precarias en condiciones de pobreza extrema y con un gran legado que aún protegen: el respeto por la naturaleza.
Sin embargo, el avance de esta maquinaria destructora de biomas y constructora de ciudades alejó a las personas de su entorno natural. Y hoy, tiempo después empieza a pagar este desinterés ambiental de la manera más cruda posible: las catástrofes ambientales.
En este contexto revitalizar a las comunidades originarias e incorporar su conocimiento a la gestión de las ciudades es uno de los factores fundamentales para la sociedad del futuro. Por esta razón, espacios como Alianza Wichi buscan ofrecer una alternativa reivindicadora para estas comunidades.
Martín Kraft, antropólogo social, fotógrafo, realizador audiovisual e impulsor de esta alianza dialogó con Utopía Urbana para contar más sobre este proyecto. Su pasión comenzó por el año 2009, cuando fue convocado por medio del Programa Permanente de Asuntos Indígenas de la UBA para hacer un taller en el Chaco salteño, en una comunidad Chorote.
“Para mí fue el puntapié inicial para conocer una realidad que me era absolutamente desconocida. No conocía a las comunidades indígenas de mi propio país y la riqueza cultural con la que me encontré en ese viaje fue increíble”.
Allí pudo entrevistar y retratar a gran parte de la comunidad Chorote y sus diversidad étnica. Hoy lleva 15 años de esta recopilación oral y fotográfica que busca resaltar el conocimiento ancestral de estas comunidades.
Uno de los ejes que más destacó el investigador de su trabajo de campo fue la gran “organización social en relación a la naturaleza”, lo que invitó a Kraft a investigar aún más en profundidad la cultura de estos pueblos para poder mantener con vida sus saberes.
De este trabajo surgió un documental que desembocó en la generación de la Fundación Originarios del cual se desprenden diversos proyectos relacionados a la permacultura, la agroforestería y demás temas que permitan potenciar el conocimiento originario, sobre todo en la generación y mantención de semillas y genéticas nativas donde cada comunidad tiene un trabajo propio.
En relación a Alianza Wichi, se trata de un proyecto internacional que tiene la intención de reconocer “la riqueza y biodiversidad del Gran Chaco Sudamericano y todas las culturas nativas y su cultura en relación al medio ambiente y al conocimiento local que tienen de los árboles, de las especies, sus formas tradicionales de manejo para la gestión comunitaria”.
REIVINDICACIÓN ORIGINARIA
Desde su espacio en Alianza Wichi y los distintos encuentros generados con referentes de la comunidad, Kraft entendió la necesidad de generar políticas basadas en la naturaleza con proyectos que son apropiados y apropiables para la comunidad, un trabajo que permite incorporar el conocimiento de las comunidades originarias del país
Hoy en día el especialista determinó una gran cantidad de problemas en relación a algunas de las tendencias ambientales tomadas por gobiernos y empresas. “El 50% de los árboles que se plantan en los territorios mueren en los primeros años, por otra parte la monocultura y los monocultivos también son un gran problema porque si sembras todo un territorio con una sola especie estas sembrando pestes que atacan a una sola especie, no hay asociaciones virtuosas entre las especies que cumplen distintos roles en la sociedad de árboles”.
Esto desembocó en proyectos referidos al cultivo basados en la diversidad de especies que buscan “combinar distintas técnicas mundiales que se van probando en relación a la bioconstrucción, las energías verdes y sustentables combinadas con el conocimiento nativo que cada cultura tiene”.
OLVIDO ANCESTRAL
“Es tremendamente llamativo como hemos perdido el conocimiento. Son hombres y mujeres muy sabias que se preguntan ¿cómo es que el hombre blanco perdió el contacto con sus ancestros?. Lo que les llama la atención es que para ellos la conexión con los ancestros es estar conectados con la naturaleza“, planteó Kraft con preocupación.
Por otra parte, para Kraft la memoria social es reducida y no entiende que los orígenes sociales son justamente estas comunidades naturales. Esto no solo lo remarcan las comunidades wichis, sino que también lo invita a pensar la naturaleza en cada catástrofe generada.
“Una gran parte de la línea del tiempo fue cortada hoy vivimos en el aquí y ahora absolutamente desconectados con estos pasados que estaban en relaciones sociales con los árboles. Los seres humanos siempre establecimos relaciones de reciprocidad con la naturaleza y eso no permitirá comprender el clima, el tiempo y lo que venía. La naturaleza es un ser espiritual que está en relación con nosotros”, explicó el especialista.
Sin dudas, la actualidad preocupante de las ciudades y sus grandes desafíos se deben a la desconexión de las sociedades a la naturaleza, pensando en un punto de partida que buscó invisibilizar a las comunidades originarias e hizo perder muchas tradiciones y costumbres que serían clave para la vida urbana.
Es que estas comunidades eran las que conocían el terreno y tenían plena consciencia de cómo adaptarse a climas, especies y situaciones. El desconocimiento posterior generó desbalances, sobre todo porque quienes buscaron impulsar las ciudades pertenecían a otros climas y a otras culturas, siendo principalmente europeos que arrasaron con las comunidades nativas.
Es desde esta base que Alianza Wichi , por medio de Martín Kraft buscan recopilar la información que, aunque parezca añeja, tiene la clave para solucionar muchos de los problemas que hoy en día azotan al Planeta Tierra.
En síntesis – Alianza Wichi
- ¿Qué es?: un proyecto colectivo que ha iniciado sus acciones junto a comunidades indígenas del Gran Chaco Argentino junto a aliados internacionales
- Misión: proteger los ecosistemas y la biodiversidad de las regiones de la Yunga y el Chaco del norte de Argentina junto con las tradiciones y los conocimientos de las culturas de los pueblos originarios de la región.
- Áreas de apoyo: soporte legal; soberanía alimentaria; agua e infraestructura; red de viveros; talleres culturales; talleres de comunicación y fotografía.
- Web: https://alianzawichi.org/index.php/home-es/
- Redes sociales: Instagram, Facebook, Twitter, Linkedin, YouTube
- Puedes donar aquí
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