No hay dudas que la utilización de la información por los distintos gobiernos es uno de los principales objetivos de cara a lo que se viene a nivel mundial ya que representan una porción de la realidad utilizada para la investigación y promoción de objetos y servicios. Por esta misma razón, desde el Consejo Europeo y el Parlamento han llegado a un acuerdo político sobre la Ley de Gobernanza de Datos.
La intención es ponerlos a disposición para crear un entorno confiable que facilite la investigación y creación de servicios, aplicaciones y productos innovadores. De hecho, esta información podría utilizarse hasta para darle impulso de una vez en Europa a los famosos gemelos digitales.
Con eso buscan promover la disponibilidad de estos datos para impulsar por ejemplo soluciones de inteligencia artificial ya sea para la medicina personalizada y asistida, la movilidad ecológica y la fabricación inteligente. Seguramente, quienes impulsan este proyecto son fanáticos de Tony Stark (conocido por su alter ego como Iron Man).
Así al menos lo dejó en claro el ministro de Administración Pública de Eslovenia y presidente del Consejo, Boštjan Koritnik quien aseguró: “El éxito de la transformación digital y la consecución de nuestros objetivos climáticos dependen de la innovación basada en los datos, que a su vez depende de la disponibilidad de datos. Por eso es fundamental generar más confianza en el intercambio de información. Esta ley no obligará a nadie a compartir sus datos, pero sí ofrece a quienes deseen ceder datos con determinados fines una manera fácil y segura de hacerlo, sin perder el control sobre ellos”.
Este acuerdo se dará a conocer frente al Comité de Representantes Permanentes del Consejo para su refrendo para ver de qué manera se aplican las disposiciones 15 meses después de puesta en marcha la normativa.
¿Qué significa esta ley?
La Ley de Gobernanza de datos, que se viene “craneando” por la Unión Europea desde hace tiempo, busca establecer mecanismos que faciliten la reutilización de determinadas categorías de datos que se encuentran encriptados dentro del sector público. Con esta medida buscan aumentar la confianza en los servicios de intermediación de datos fomentando la cesión y facilitación a la Unión Europea para crear aplicaciones y servicios.
Dentro de estas categorías de datos se incluyen los de propiedad intelectual, los secretos comerciales y los datos personales. Además, se da en el marco de la Estrategia Europea de Datos, que fue creada para reforzar la economía de los mismos, como así también mejorar su administración, riqueza y bienestar para otorgar a Europa una ventaja competitiva a la hora de mejorar los servicios a la ciudadanía y por sobre todas las cosas, facilitar el acceso al sector privado.
Sin embargo, no dejarán todo al libre albedrío, ya que se previó la creación de un Comité Europeo de Innovación en Materia de Datos, que estará encargada de asesorar y ayudar a dicha Comisión a llevar adelante las tareas pertinentes, mejorando la interoperabilidad de estos servicios para permitir facilitar aún más la aparición de nuevos espacios de datos en la región. Claro, que las decisiones serán tomadas por la Comisión.
¿Qué medidas tomarán?
Más allá de que se trate de un escenario complejo de trabajar, por la dificultad de acceder a los datos pero también a los grandes costos que genera ese tipo de acción, desde la Comisión buscarán lograr la financiación necesaria para el proyecto.
La Ley de Gobernanza de Datos, que ha sido catalogada como uno de los puntos más importantes en la gestión administrativa de cara a los próximos años, busca tomar medidas para aumentar la confianza en el intercambio de datos.
Además, se trabajará en la fiabilidad de los datos, por lo que los proveedores deberán completar un registro para otorgar confianza a sus clientes. Por otra parte, recogerá medidas que faciliten la reutilización en algunos casos que incluyen al sector público, como por ejemplo la información sanitaria, algo que dejó de aprendizaje la pandemia.
Además, la Comisión Europea permitirá la existencia de acuerdos exclusivos que también quedarán constatados en un registro único europeo. El objetivo es hacer más fácil y segura la tarea para las empresas, particulares y administración pública con condiciones claras y seguras para todas las partes.