El municipio de San José (Estados Unidos) lanzó un proyecto público-privado inédito en el país, según palabras del alcalde Sam Liccardo. Consiste en utilizar criptomonedas para reducir la desigualdad digital e impulsar el acceso a internet en los sectores de la población con menores ingresos.
El proyecto se desarrollará en conjunto con Helium, una empresa de redes peer to peer y tecnología blockchain, y con la ONG California Emerging Technology Fund (CETF).
La idea consiste en instalar por los barrios de bajos ingresos unos 20 puntos de acceso inalámbricos desarrollados por Helium para conectar dispositivos y conformar una red descentralizada de internet de las cosas preparada para la minería de criptomonedas.
Estas monedas digitales extraídas con los dispositivos mediante la minería, se utilizarán para subsidiar los costos del servicio de internet de más de 1300 hogares durante un año.
Los hotspots o puntos de acceso fueron diseñados por Helium y serán comprados por CEFT para entregar a la ciudad de San José. Estos hotspots están preparados para conectarse a dispositivos pequeños como GPS, sensores de movimiento y de calidad del aire, cámaras, entre otros dispositivos de este tipo.
La posibilidad de conectar estos dispositivos a los hotspots, aumentará la infraestructura local de Internet de las cosas (IoT) y fortalecerá programas de ciudad inteligente como el control de la calidad del aire, la detección de incendios y las fugas de agua, entre otros.
Por otra parte, los hotspots utilizarán los dispositivos conectados para extraer HNT, la criptomoneda emitida por Helium que se puede intercambiar por otras criptomonedas y por dólares estadounidenses.
En esa instancia, CETF se encargará de intercambiar la criptomoneda HNT extraída por los hotspots por dólares para que el municipio de San José deposite los subsidios a través de tarjetas prepago que los residentes de bajos ingresos podrán utilizar para pagar su servicio de Internet.
Este círculo virtuoso, de ser exitoso, generará un doble impacto positivo en San José. Ya que reducirá la brecha digital en la sociedad y potenciará las iniciativas que cimentan el camino hacia una ciudad inteligente.
