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El proyecto que establece la protección de estos espacios y la creación de un fondo nacional para financiar las actividades, será tratado en la Cámara de Diputados el 30 de diciembre. Hay expectativa y esperanza para su aprobación que se viene postergando desde el año 2013.

Más de diez años atrás, cuando la participación ciudadana aún era un sueño de algunos, cientos de personas en todo el país se mancomunaron tras un grito de justicia colectiva: exigir la Ley de Protección de los Humedales en todo el territorio argentino. Hoy, contra todas las negativas de empresas y gobiernos durante una década, parece estar cada vez más cerca su sanción. 

Esta iniciativa ciudadana fue presentada ante las autoridades en más de una oportunidad, obteniendo dos medias sanciones que terminaron siendo falsas promesas. La primera en el año 2013, la segunda en 2016, ambos cuerpos fueron rechazados en el recinto de la Cámara de Diputados. 

Para entender la importancia de este proyecto es necesario comprender cuál es la definición de los humedales. En pocas palabras, tal como lo indica el nombre, se trata de superficies que se encuentran inundadas o con el suelo saturado de agua durante gran parte del tiempo, lo que permite mantener condiciones de humedad que facilitan el desarrollo allí de cierta vida y microorganismos que no se encuentran en otros espacios terrestres.

La actualidad preocupante por la amenaza del Cambio Climático es tan trágica que ha llevado a que existan largos periodos de sequía en regiones donde nunca había pasado, y en parte es culpa de que han empezado a destruir estos importantes humedales que albergan, además de grandes cantidades de agua, una gran variedad de flora y fauna que enriquece la vida por medio de sus interrelaciones.

América Latina es una de las regiones del mundo más beneficiadas por la naturaleza en este sentido. En Argentina, por ejemplo, los humedales  ocupan más de 600.000 km² del territorio nacional (21,5% de la superficie terrestre), según pudieron relevar desde el sitio oficial de la Organización, Ley de Humedales Ya, que brinda información sobre la importancia de proteger estos espacios naturales. 

En el país, uno de los casos más conocidos es el de los Esteros del Ibera (provincia de Corrientes), el segundo más grande humedal de todo el continente y el más importante de Argentina, con una capacidad única de mantener el equilibrio de los ecosistemas litoraleños. Para informarte sobre los diez humedales más importantes del mundo haz click aquí. 

Ejes centrales del proyecto

El cuerpo del proyecto, una foja de 34 páginas plantea que el principal objetivo de la ley es establecer los presupuestos mínimos para la conservación, uso racional y sostenible de los humedales en todo el territorio de la Nación, asegurando la integridad de los servicios ecosistémicos que brindan, como así también el respetar de su valor inherente”. 

Para esto, los fundadores del proyecto establecer 4 ejes centrales para conseguirlo: 

(i)- Uso respetuoso

La difícil situación de los humedales en la actualidad tiene correlato con una degradación intensa y rápida de estas regiones. Por eso mismo, según explicaron desde la ONG, “la mejor manera de conservarlos es favorecer el uso ambientalmente respetuoso y las actividades que preservan sus funciones ecológicas y eliminar los factores que los perturban”.

Por esta razón, la propuesta busca que los funcionarios públicos controlen la actividad humana en las cercanías. Durante los últimos años se han denunciado diversas violaciones a estos espacios, que van desde la tala, hasta la construcción de hoteles e hipermercados.  

(ii)- Fondo para humedales

Para poder llevar a cabo estas actividades, es necesario que exista un financiamiento nacional. Por esa razón, desde el proyecto de ley buscan “redireccionar los incentivos que entrega el Estado a actividades perjudiciales hacia la promoción de acciones de conservación, uso ambientalmente respetuoso y restauración”.

Con esto, además de poder incentivar diversos proyectos a lo largo y ancho del país,    esperan que eso también signifique una “distribución justa y equitativa que contemple la compensación de las regiones que sufran pérdidas”.

(iii)- Participación ciudadana

Tal como surgió este proyecto, desde la mesa chica entienden que es necesario que se siga articulando por medio de políticas de participación ciudadana y gobierno abierto que permitan a los ciudadanos ser parte real del cambio. “Es necesario que la ley visibilice el patrimonio cultural tangible e intangible que se desarrolla en los humedales: tanto los modos y medios de vida como los conocimientos tradicionales y los saberes locales”, explicaron desde la ONG. 

Para ello, consideran que es necesario ganar la batalla cultural y que sean las propias personas las que se encarguen de defender estos territorios: “Es necesario frenar el avasallamiento de derechos y los procesos de desposesión y migración forzada de las comunidades. Por eso, aspiramos a procesos de toma de decisiones con oportuna, amplia, efectiva e informada participación”, concluyeron. 

(iv)- Inventario

Para poder tener un seguimiento real de la situación de los humedales en Argentina desde el proyecto buscan asegurarse de que exista un mapeo y monitoreo participativo entre la sociedad y las autoridades a cargo de la situación. 

Argentina y su histórica legislación 

Fue la reforma constitucional del año 1994 la que incorporó la protección de estos ambientes en el artículo 41 del texto, sobre Derechos Ambientales. Más tarde, en 2002 se volvió a asumir el compromiso por medio de la promulgación de la Ley General de Ambiente (Ley 25.675).

Sin embargo, no fue hasta el 2013 que hubo un proyecto de ley específico sobre los humedales. Allí se presentó el 1º proyecto de presupuestos mínimos para humedales realizada por la Senadora Elsa Ruiz Díaz (Entre Ríos; perteneciente al bloque del Frente para la Victoria, partido entonces en el gobierno nacional) con la asistencia de Fundación Humedales.

Ese mismo año, se presentó el segundo proyecto de Ley, pero esta vez fue el Senador Rubén Giustiniani (Santa Fe; perteneciente al Socialismo), con la asistencia técnica de diversas organizaciones de la sociedad civil quien lo redactó. Meses después, ambos proyectos se unirían y pasarían a ser un único proyecto.

Durante este tiempo, se presentaron diversas actualizaciones a estos proyectos que también se fueron incorporando y uniendo entre sí. Pero ninguno logró tener los votos necesarios en Diputados. 

Ahora, tras algunos años de cajoneo, el proyecto de Ley de Humedales avanzará a la Cámara de Diputados de la Nación luego de la votación que fue favorable 57 a 47 en un plenario de las comisiones de Recursos Naturales, Presupuesto y Agricultura. El debate en la Cámara de Diputados empezará antes del próximo 30 de diciembre, día en que finaliza la prórroga establecida para el período de sesiones ordinarias. ¿Qué sucederá?

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