Cientos de veces los organismos internacionales encargados de la protección ambiental han encendido las alarmas por la tala e incendios en los bosques nativos. Con la pérdida de la flora regional se imposibilitan algunos procesos naturales que son necesarios para mitigar el Cambio Climático.
La cantidad de bosques perdidos alcanza las 15 millones de hectáreas por año en el mundo, la mayoría de ellas ubicadas en las selvas tropicales. Según una investigación realizada por la FAO, en la que avisaron que “los números no son indicadores esperanzadores”, por culpa de la cantidad de bosques nativos que disminuyen considerablemente.
En parte por la tala indiscriminada para producir papel, muebles y materiales de construcción, pero por otra parte por la gran cantidad de incendios generados por el poder de la industria de los bienes raíces que buscan liberar de bosques el planeta para poder levantar importantes edificaciones que fortalezcan su negocio, los pulmones verdes del mundo han sido devastados de manera indiscriminada durante las últimas décadas.
Las grandes sequías producidas en algunas regiones europeas como España, pero también en la Patagonia argentina han producido grandes olas de calor que desembocaron en violentos incendios de grandes magnitudes que resultan difíciles de apagar.
Lo peligroso de este tipo de incendios no solamente es la pérdida de esta flora nativa y lo difícil de recuperarla, sino también el estrés que estas catástrofes le generan a los ecosistemas nativos que tardan años en recuperarse. Además, al quemarse, los árboles liberan todo el CO2 que han absorbido por lo que es necesario frenar los incendios forestales.
Otro factor, según la FAO es la deforestación causada “por el cambio de tierras agrícolas hacia tierras de pastoreo, y la tala de madera para leña y para construcción”.
Rol de los árboles en la mitigación del Calentamiento Global
Los estudios modernos sobre la cantidad de árboles necesarios para mitigar el calentamiento global indican que cada vez se está más lejos de la media necesaria. Se estima que para absorber el carbono de un mes, una persona debería plantar seis árboles por mes.
Hoy por hoy, en la época digital, no es incluso necesario utilizar una pala para hacerlo, porque hay diversas ONG que ofrecen este servicio social por pequeñas contribuciones mensuales. Como ejemplo, en Argentina la ONG Un Árbol, es una de las organizaciones que realiza esta tarea de manera nativa. “Si tenemos que definir en una palabra lo que hacemos es regeneración socio ambiental”, expresó a Utopía Urbana uno de los socios fundadores, Gonzalo Medendez.
Desde sus comienzos en el año 2011 realizaron 15 huertas y viveros de triple impacto complementando con múltiples oportunidades de oficios verdes por medio de las capacitaciones brindadas. En total se desarrollaron más de 700 talleres abiertos al público para impulsar y dar a conocer la importancia de la conciencia ambiental. Y una cantidad superior a las 20 mil personas fueron partes de actividades de forestación o donación de más de 13.500 árboles.
He aquí el rol fundamental de los árboles en la cuestión ambiental, principalmente en lo relacionado a la mitigación de los efectos del Cambio Climático. Si bien un solo árbol es capaz de absorber grandes cantidades de carbono de forma anual, los bosques concentrados en el mundo son uno de los factores importantes para almacenar el carbono de manera natural.
Los mismos realizan el secuestro de carbono por medio de sus hojas y lo almacenan en su madera, por lo que los árboles más longevos por ejemplo son capaces de almacenar grandes cantidades de carbono anual. Por otro lado, son responsables de nada más nada menos que del 28% del oxígeno que hay disponible en el planeta.
Por otra parte, las FAO también expresaron: “El manejo forestal y de los ecosistemas no puede resolver, por sí solo, el problema del calentamiento global. Las emisiones, junto con la deforestación de los trópicos y otros cambios en el uso del suelo, compensan sólo una pequeña porción de las emisiones provenientes de la quema de combustible fósil”.
Para ayudar a realizar estas mediciones es importante que cada persona tenga una noción aproximada de la huella de carbono que generan. Para eso existen diversas aplicaciones, como el caso de Carbon Sink, que brinda herramientas a sus usuarios para conocer sus consumos, así como también consejos para reducir la utilización del carbono.
Plantar árboles es parte de este programa claro, aunque la compensación de carbono es uno de los objetivos más importantes para Carbon Sink. Son varias las empresas que ya han asegurado que este tipo de servicios son fundamentales para el desarrollo ambiental de las regiones, por eso es importante conocer las herramientas que lo hacen factible.
En relación al aporte real que los árboles hacen a los ecosistemas, desde el organismo internacional explicaron que “es difícil cuantificar su contribución”, sin embargo “el manejo de C, junto con otras medidas en los ecosistemas tropicales pueden ser actores en el plan global”.
La investigación de las FAO sugiere que están surgiendo nuevos retos para el manejo sostenible de los bosques. Sin embargo, esto no implica que no se pueda hacer algo. Las conclusiones no son positivas, la realidad tampoco. La necesidad de parar con la tala y conservar los bosques nativos es una de las principales urgencias ambientales de la modernidad. ¿Vos ya estás plantando árboles?