“No se vé mucha reacción de los gobiernos, no activan” afirma con énfasis Bruno Giambelluca, señalando la pasividad de los gobiernos respecto al cambio climático. El joven bahiense trabaja en Greenpeace como coordinador de la campaña de clima y energía que abarca a Argentina, Colombia y Chile.
Dice que los gobiernos, a nivel mundial y regional, deberían comprometerse y responder con acciones y medidas para atender los problemas ambientales, más allá de las promesas discursivas que pocas veces se concretan.
Hablando de compromisos ¿Qué expectativas tenés sobre la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) de noviembre en Glasgow (Escocia)?
La COP 26 es una cumbre distinta a las anteriores. Yo participé de la última en Madrid y no había una pandemia, era otro contexto. Ahora creo que la gente presta más atención a lo ambiental, los científicos cada vez presionan más, como el último informe del IPCC, el nivel de advertencia es cada vez más fuerte y más explícito, ya no es algo del futuro sino que es ahora.
Y no se vé mucha reacción de los gobiernos, no activan. Y los científicos nos dicen que tienen que tomar decisiones lo más rápido posible para reducir las emisiones que generamos, esa es la meta concreta.
“Los países ricos tienen que comprometerse con el Fondo Verde”
En la COP va a haber muchas cosas que resolver. Los daños a los países insulares que están sufriendo daños ambientales por algo que no generaron ellos; la distribución de fondos para ver cómo los países pueden adaptarse al cambio climático y también mitigar, porque todo implica inversiones, traspaso de energía.
Los países ricos tienen que comprometerse con el Fondo Verde, que se creó a partir del Acuerdo de París para los países que necesitan ayuda financiera y créditos para invertir en mitigación y adaptación al cambio climático. Si mirás la comparativa del presupuesto para subsidios de energías fósiles y el destinado al Fondo Verde, las fósiles reciben alrededor de cinco veces más. No sirve eso.
¿Cuáles son los principales desafíos ambientales de Latinoamérica y de Argentina?
Es complicado porque nuestro país no tiene un plan a largo plazo que diga cuántas emisiones se van a reducir y en qué áreas, en movilidad por ejemplo. Si bien hay algunos proyectos desarticulados, no hay un plan concreto. Y eso es peligroso para el país, porque estas iniciativas son a largo plazo siempre.
En residuos, por ejemplo, no se van a ver los resultados al otro día. Entonces tener planificación es importante.
“Argentina sigue insistiendo en combustibles fósiles y esa industria no está dando los resultados económicos que tiene que dar”
Además desde Greenpeace estamos impulsando que se cree un área marina protegida y que no se expanda la frontera petrolera porque iríamos en contra de los acuerdos que firmamos, entre otras demandas.
Argentina sigue insistiendo en combustibles fósiles y esa industria no está dando los resultados económicos que tiene que dar. Por ejemplo en Vaca Muerta estamos subsidiando energías fósiles. Mucha gente ya no cree en eso pero no quiere que le aumente la nafta, ésto genera una situación compleja.
Hay un planteo de varios países subdesarrollados en bloque, argumentan que necesitan más recursos para reconvertir su modelo productivo y que los países que más contaminan se aprovecharon del modelo extractivista para desarrollarse a gran escala.
Sí, es un reclamo en bloque de muchos países.
Yo creo que la gran mayoría entiende que estamos en una situación muy grave y que el cambio climático tiene impacto global y es algo incontrolable.
En Sudamérica es compleja la situación por la debilidad económica de los países. Se vive mucho el día a día y no hay planificación a largo plazo. Todo cambia cada 4 años.
“No tenemos un sistema de toma de decisiones a largo plazo”
Por ejemplo en Bahia Blanca, mi ciudad, se había establecido un programa de reciclaje. Cambió el gobierno y se volvió para atrás. Después se retomó varias veces dependiendo del gobierno de turno.
Eso hace que estemos en una situación frágil. No tenemos un sistema de toma de decisiones a largo plazo y eso complejiza toda la situación.
¿Cómo se podría avanzar hacia ciudades inteligentes, sustentables e inclusivas? ¿Qué condicionantes existen?
A partir de la pandemia la gente empezó a entender que necesita más espacio público, más plazas. En vez de construir torres de 50 pisos, hagamos una plaza. Esto se replica en todos lados, la necesidad de espacios verdes, hacer peatonales en avenidas.
Lo que decimos en Greenpeace es “ciudades para las personas, no para los autos”. Hasta ahora en Argentina se cree que las avenidas tienen que tener más carriles para ir más rápido. Es cultural el problema.
Con la pandemia también hubo mucha más necesidad de movilidad. Gente caminando, usando bicicleta, monopatín. Hubo una explosion del uso de la bicicleta en CABA pero también en muchas ciudades del mundo.
En CABA se cerraron calles para convertirlas en semipeatonales pero no se mantuvieron después de la cuarentena estricta, fue algo temporal. En París se hizo lo mismo y se mantuvo. Tal vez sea una solución para darle mejor calidad de vida a la gente, pero también es difícil porque no está pensado a largo plazo y hay muchos automóviles en la ciudad.
“Hay que pensar a qué costo expandimos el negocio inmobiliario”
Las supuestas ciclovías en CABA, en realidad son una pincelada en la calle y yo que soy ciclista te digo que no se puede andar bien, es muy inseguro. Habría que invertir en infraestructura y que la gente se sienta segura para usarla, para ir a trabajar en bici.
También invertirá en energía solar para edificios públicos, que se hace cada vez más. Los privados podrían tener ayudas si usan energías renovables.
En separación de residuos también. La ciudad de Buenos Aires tiene la ley de basura cero pero la realidad es que no se cumple como debería, porque no se está reduciendo la basura que se entierra, el problema sigue.
Habría que pensar algo relacionado al consumo, las ciudades son fuente de mucho consumo porque hay supermercados. En el interior hay más consumo de almacén. En los supermercados podría haber un espacio para consumir a granel, por ejemplo.
Argentina es bastante abierta a este tipo de iniciativas. La gente tiene que preguntarse qué había donde viven ahora. Hay que pensar a qué costo expandimos el negocio inmobiliario, qué impacto tiene, cómo afecta a cada uno, repensar más allá.
Respecto a las medidas para regular la gestión de los residuos, en varios países se avanza hacia la Responsabilidad Extendida o Ampliada del Productor. ¿Se podría aplicar en Argentina?
La Responsabilidad Extendida del Productor es algo que existe en la Unión Europea, en Estados Unidos y en otros países. Lo que busca es que el fabricante sea el responsable por el tratamiento y reciclaje de sus productos. Eso hace que los productos, en el proceso de fabricación o en su versión final, sean más amigables con el ambiente
Para una empresa obviamente es más redituable no hacerse cargo del destino de una pila, por ejemplo, pero si tuviesen que sobrellevar el costo de reciclarla, intentarían reducir ese costo y hacer productos más sustentables. Entonces estas leyes presionan para que no se produzca todo tan descartable
En Argentina se quiso incluir la responsabilidad extendida del productor dentro de la ley de residuos electrónicos y no salió a la luz por el lobby de las empresas. Son muy fuertes y tienen poder de presión. Y la solución no es apelar al consumidor, sino a los responsables: el estado y las empresas.
“La solución no es apelar al consumidor, sino a los responsables: el Estado y las empresas”
Si la gente reciclara más el cambio climático seguiría. Ayuda a reducirlo pero no es la solución. La solución sería invertir en energías limpias y no en fósiles.
Además no todos tienen la posibilidad de elegir un producto 4 A, que consume menos energía. A veces tienen que comprar cualquier heladera. El acceso es un problema bastante grave.
Entonces los fabricantes tienen que vender un producto pero ser responsables de su impacto ambiental.
En este sentido, poniendo el foco en las nuevas generaciones ¿Creés que ya tienen internalizadas las preocupaciones ambientales? ¿Ves respuestas a sus demandas por parte de los estados?
Sí. Vimos casos como los de Greta Thumberg que empezó un movimiento a partir de una protesta en el parlamento de su país. Los jóvenes empezaron a decir que quieren soluciones, que su futuro está en juego. Eso se ve cada vez más. Chicos y chicas que saben que no es un problema del futuro, que lo ven ahora. Jóvenes por el Clima es un ejemplo.
Hay muchas organizaciones en Argentina que están integradas por jóvenes que lo que buscan es tener respuestas a muchos reclamos que plantean, como nosotros en Greenpeace que nos preguntamos qué planeamos a largo plazo, cuál es la solución, cómo aportamos.
Porque la postura del gobierno es que no somos los más contaminantes. Pero tampoco somos los que menos contaminamos.
“Los jóvenes empezaron a decir que quieren soluciones, que su futuro está en juego”
Los jóvenes son un segmento que lleva la discusión a la mesa, hacen que se debata el tema ambiental. Ya es un tema diario y para cualquier edad, no sólo de científicos en los medios. Y eso influye en los tomadores de decisiones para que entiendan que el cambio climático es grave para esa población.
Es un público que atrae a los tomadores de decisiones pero todavía no se ve el problema medioambiental como parte del debate de la política. No se llegó a atender el tema, a darle la importancia que necesita.

Si bien se escuchan las demandas, las de la última marcha por el cambio climático en la que hubo como 10 mil personas, por ejemplo; no se alcanza un compromiso para debatir estos temas o se dan discusiones muy abstractas, sin soluciones.
Hoy en día hay más personas interiorizadas sobre el medioambiente. A través de nuestra plataforma «Somos Puente» nos llegan muchas peticiones, la gente está informada. Hacen reclamos y quieren mejorar su calidad de vida.
¿Qué ejemplos de generación de empleo verde podrías citar?
Un ejemplo podrían ser los planes de basura cero. Generan mucho empleo, más de lo que se cree. Se incluye a un montón de personas que no tienen trabajos estables empleando recicladores en el marco de una cooperativa y se convierten en trabajadores propios de la industria del reciclaje.
Esto se repite también en la generación de energía renovable. Está comprobado que la energía limpia genera más puestos de trabajo que el manejo de una planta nuclear o de combustible fósil, por ejemplo.
“Nosotros planteamos que se establezcan planes de basura cero”
En Colombia el gremio de recicladoras y recicladores es muy fuerte y lo que se pide es que esos trabajadores entren en un marco de trabajo formalizado. En general esa gente no está formalizada, no tiene cobertura ni seguridad.
Nosotros planteamos que se establezcan planes de basura cero, que se emplee gente que se dedica a eso y que sabe lo que es, pero que lo haga dentro de un marco formal. Con protección, con seguridad y un sueldo.