Casi 40 mil toneladas anuales de descartes de la industria textil son acumuladas en grandes montañas a lo largo de 300 hectáreas del desierto chileno. En su mayoría son de poliéster -proveniente del petróleo-, que con el sol directo se prenden fuego emitiendo Gases de Efecto Invernadero. La mayor parte de la ropa llega de Europa, Estados Unidos y Asia. Alternativas de solución