Los Fab Labs, o Laboratorios de Fabricación Digital, han surgido como auténticos impulsores de creatividad y desarrollo local. Originados a principios del 2001 en el Center for Bits and Atoms (CBA) del Massachusetts Institute of Technology (MIT), estos espacios para la producción de objetos físicos a escala personal o local se han convertido en un fenómeno global con un impacto tangible en la sociedad. Te contamos algunos ejemplos.