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Construida casi en secreto y proclamada capital de Birmania en 2005, Naypyidaw es una de las ciudades más grandes del mundo en superficie, pero su vasto tamaño contrasta con su escasa población. Aunque alguna vez fue considerada una ciudad fantasma, esta moderna metrópolis de Myanmar está en proceso de convertirse en un centro vibrante y dinámico.

En un mundo donde las capitales suelen ser centros históricos llenos de vida, Naypyidaw, la capital de Myanmar (país también conocido como Birmania), emerge como una excepción intrigante. Construida casi en secreto y proclamada capital en 2005, esta vasta ciudad, cuatro veces y media más grande en dimensión que Londres, se ha ganado el apodo de “ciudad fantasma”. Con un gasto estimado de US$ 4 mil millones en su desarrollo, Naypyidaw fue concebida para ser una metrópolis vibrante, pero durante muchos años permaneció vacía, un enigma en el corazón de Asia.

La decisión de trasladar la capital de Yangon a Naypyidaw en 2005 sorprendió a muchos, tanto dentro como fuera de Myanmar. La razón oficial para este cambio permanece envuelta en misterio, alimentando especulaciones y teorías. Algunos sugieren razones estratégicas y de seguridad, dada la ubicación central de Naypyidaw, lejos de las vulnerables costas y más cerca de las bases militares. Otros creen que fue una medida para ejercer un control más estricto sobre el país.

El diseño y la construcción de Naypyidaw fueron proyectos titánicos. Con un territorio de 7,054 kilómetros cuadrados, la ciudad es una de las más grandes del mundo en términos de superficie. Se construyeron enormes autopistas de 20 carriles, amplias avenidas y una infraestructura moderna que incluye suministro de electricidad confiable, una rareza en otras partes del país.

A pesar de estas obras faraónicas, la población de Naypyidaw ha crecido lentamente. Hoy en día, cerca de un millón de personas residen en la capital, una cifra minúscula comparada con los casi nueve millones de habitantes de Londres. Esta discrepancia ha resultado en extensas áreas urbanas desiertas, con grandes bulevares y mercados vacíos que contribuyen a la atmósfera de una ciudad fantasma.

¿Dónde está ubicada Naypyidaw, la capital de Myanmar (Birmania)?

Fuente: Google Map

A pesar de su baja densidad poblacional, Naypyidaw ofrece una gama de atracciones y comodidades. La ciudad cuenta con hoteles de lujo, campos de golf, centros comerciales y numerosos restaurantes y cafés que atraen a visitantes con la promesa de Wi-Fi gratuito. Entre las principales atracciones se encuentran el Zoológico de Naypyidaw, uno de los más grandes de Asia, y el Parque de Elefantes, que ofrece un vistazo a la fauna local.

El Centro de Convenciones de Myanmar y la Gran Pagoda Uppatasanti, una réplica casi exacta de la icónica Shwedagon Pagoda de Yangon, son otros puntos de interés que destacan la grandeza y el propósito multifacético de la capital.

La transición de Naypyidaw de una ciudad fantasma a una metrópolis activa está en proceso. Las autoridades siguen promoviendo la ciudad como el corazón administrativo y político de Myanmar, con la esperanza de atraer más residentes y negocios. Los esfuerzos para incrementar la conectividad y la infraestructura continúan, y el gobierno fomenta la inversión extranjera para dinamizar la economía local.

A pesar de los desafíos, Naypyidaw es un testimonio del potencial de una planificación urbana ambiciosa. Su transformación en una “maravilla faraónica” puede ser lenta, pero la ciudad sigue evolucionando, ofreciendo una visión única y moderna de lo que una capital del siglo XXI puede ser.

Naypyidaw es una ciudad que desafía las normas y expectativas. Desde su creación envuelta en misterio hasta sus vastas y desiertas avenidas, la capital de Myanmar es un ejemplo fascinante de planificación urbana a gran escala. Con el tiempo, lo que comenzó como una ciudad fantasma puede muy bien convertirse en un centro vibrante y dinámico, una verdadera maravilla moderna en el corazón de Asia.

Reel Utopía Urbana – Naypyidaw, de ciudad fantasma a maravilla faraónica

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