Londres fue históricamente una zona reconocida por el smog que se ve en sus calles. No solo por las nubes grises que disfrazan de lluvia el clima inglés, sino también por la contaminación de su tráfico en las áreas céntricas y más transitadas. Sin embargo, pese a todo pronóstico, ha empezado a dar vuelta la ecuación gracias a un plan integral de Zonas de Ultra Bajas Emisiones (ULEZ, por sus siglas en inglés), únicas en el mundo.
Esta estrategia, que se dio bajo la gestión del alcalde Sadiq Khan, ha sido un punto de inflexión significativo en la mejora de la calidad del aire en la capital británica. Se introdujo por primera vez en 2019 y se amplió en la ciudad en 2023, teniendo un impacto notable en la reducción de los niveles de contaminación atmosférica, superando los logros alcanzados en otras partes del país.
QUÉ SON LAS ULEZ
Las ULEZ son una profundización de las conocidas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), pero incluso con mayores objetivos de impacto que aquellas. Estas son áreas designadas en las ciudades donde se aplican estándares estrictos de emisiones de vehículos para reducir la contaminación atmosférica y mejorar la calidad del aire, a través de la regulación del tránsito según el perfil de motorización. Estas zonas están destinadas a desincentivar la circulación de vehículos que emiten altos niveles de contaminantes, como dióxido de nitrógeno (NO2) y partículas finas (PM), mediante la imposición de tarifas o multas a los vehículos que no cumplen con los estándares establecidos.
Por lo general, los vehículos más antiguos y contaminantes, especialmente los diésel y nafteros, son los que se ven más afectados por estas restricciones. La implementación de las ULEZ fue una medida clave en los esfuerzos de las ciudades para abordar la contaminación del aire y promover formas más limpias de transporte.
Aquí en Utopía Urbana te hemos contado acerca de la aplicación de ZBE en algunas ciudades de España y hasta en urbes de países en desarrollo como Guadalajara (México).
REDUCCIÓN DE EMISIONES CONTAMINANTES
Los datos recopilados desde la implementación de la ULEZ muestran una caída drástica en las concentraciones de dióxido de nitrógeno (NO2) en las carreteras de Londres, con una reducción de casi la mitad entre 2016 y 2023.
Esta disminución en los niveles de contaminantes atmosféricos ha llevado a que Londres registre los niveles más bajos de NO2 desde que se comenzaron los registros, incluso por debajo de los niveles experimentados durante los períodos de confinamiento por COVID-19.
Además, el número de sitios de monitoreo que exceden los límites legales de contaminación del aire del Reino Unido ha disminuido significativamente en Londres, pasando de 56 puntos en 2016 a solo cinco en 2023. Este éxito se atribuye en gran medida a la ULEZ, que ha establecido estándares estrictos de emisiones para los vehículos que circulan en la ciudad, logrando que más del 95% de los vehículos cumplan con estos estándares.
La caída se produjo a pesar de que la población de Londres había aumentado en más de un millón de personas, según el informe, y fue una caída mayor que la de Inglaterra en su conjunto, con un 35%, Escocia un 39%, Gales un 31% e Irlanda del Norte un 27%.
El que se refirió al caso fue el propio alcalde que aseguró: “Londres está a la vanguardia, limpiando nuestro aire a un ritmo mucho más rápido que el resto del Reino Unido. El aire limpio es importante por muchas razones: ayuda a aumentar la esperanza de vida de los niños, reduce las admisiones hospitalarias por asma y afecciones pulmonares graves y permite a las personas llevar una vida más larga y saludable”,
Además sentenció: «A pesar de algunas mejoras en la red de transporte público en Londres, todavía se necesitan más acciones en muchos puntos calientes de aire tóxico, especialmente en los distritos exteriores». Un claro ejemplo de que incluso en el denominado “primer mundo” aún se está lejos de cumplir con los objetivos planteados por la Agenda 2030.
El caso de Londres es un ejemplo de cómo las políticas públicas pueden influir en la calidad de vida de las personas. Planes que pueden impulsarse desde la gestión y el orden sin necesidad de grandes inversiones en tecnología. Las ULEZ son sin dudas uno de los modelos que más se replicará en los próximos años, dándole cada vez más prioridad a la movilidad eléctrica.
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