Lograr la transición hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) promovidos por las Naciones Unidas en pos de enfrentar el Cambio Climático no es algo de responsabilidad exclusiva de empresas y gobiernos. La sociedad civil también debe estar comprometida y organizada.
No solo por la necesidad de masificar los intentos por alcanzar la sustentabilidad global, sino también para lograr una mayor respuesta ambiental a estas problemáticas. Para esto es necesario hacerse de hábitos sostenibles cotidianos que se puedan aplicar en la vida diaria.
Si bien puede tratarse de una visión subjetiva y parcial de potenciales acciones sostenibles, desde Utopía Urbana repasamos algunos hábitos simples de incorporar que pueden mover la aguja de la sustentabilidad desde la comodidad del hogar y las actividades del día a día.
- Separar los residuos
Sin dudas uno de los pasos iniciales para comprender cómo mejorar la utilización de los recursos es separar los residuos. Si bien hay lugares del mundo como China donde las personas deben pagar impuestos para sacar la basura y clasificarla en al menos cuatro tipos distintos de bolsas, en Argentina aún esa realidad no ha llegado.
Sin embargo, no se trata de aprovechar el tiempo hasta que esto se convierta en una obligación, sino de poder encontrar formas de lograr una transición antes. Para esto es indispensable separar al menos entre orgánicos y reciclables.
La bolsa de residuos negra lleva lo que es considerado basura y va directo a entierro sin un proceso de clasificación y la bolsa verde es la que lleva envases plásticos como botellas o envoltorios.
De esta manera no solo se reduce considerablemente la cantidad de basura a nivel global, sino también dentro de las mismos hogares, ya que uno aprende a ser más consciente de lo que genera.
- Reduce, recicla, reutiliza
Las 3R son otros de los conceptos claves en relación a la basura generada en nuestros hogares: Reducir, Reciclar y Reutilizar. Esta simple regla está destinada a poder disminuir los consumos y así evitar adquirir objetos nuevos innecesarios que solo van a contaminar.
Esto se logra no solo evitando estas compras inútiles, sino también en explotar al máximo las cosas que ya tenemos. Dicho de otra manera, y como ejemplo, no es necesario cambiar el televisor por un modelo nuevo mientras este funcione.
Por otra parte, para finalizar con esta regla, la intención es poder reutilizar los productos por medio de la reincorporación de los mismos a la matriz productiva. Un ejemplo, en vez de tirar los plásticos a las bolsas negras, meterlas en la bolsa verde para poder triturarlo y volver a producir.
Una opción como Botella de Amor es un gran paso para ayudar a incorporar estos elementos y productos a la cadena de producción. Es tan simple como llenar botellas o bidones con plásticos de fideos, arroz, galletas, polenta, etc.
- Usa la bicicleta o el transporte público
Si todas las personas utilizaran el transporte público, recurrieran a la electromovilidad o mejor aún a la bicicleta o caminar para trasladarse se disminuirían considerablemente las emisiones de dióxido de carbono de las ciudades. No solo por la merma en la cantidad de vehículos circulando al mismo tiempo, sino también porque de esta manera se evitan embotellamientos.
Esto es mucho mejor en aquellas ciudades que están diseñadas para trasladarse de manera simple y fácil con bicicletas por ejemplo. Uno de los casos más emblemáticos es el de Dinamarca, pero la realidad indica que una de las alternativas más simples de disminuir la huella de carbono de las personas es el uso de bicicleta como medio de transporte.
- Cultivar de manera urbana
Uno de los hábitos más saludables y sustentables de la etapa post pandemia es el cultivo urbano. No solo porque permite alimentarse a partir de la producción personal, sino por la capacidad de capturar carbono de las plantas dentro de la ciudad.
Por eso, las huertas en terrazas, balcones o cultivos indoor, son clave para una mejor oxigenación del medio ambiente. Además de poder consumir plantas aromáticas, alimentos y hasta tabaco de manera orgánica y natural. Cabe destacar la necesidad de cultivar con fertilizantes naturales y producidos con insumos locales. Además de estas prácticas es recomendable también compostar, en esta nota con Compostate Bien, podes encontrar tips saludables para esta práctica.
5-Consumir de manera sustentable
Las compras en los supermercados ya empiezan a quedar, paulatinamente, como un viejo hábito. No solo por lo lejos que suelen quedar de algunas zonas y el tiempo que lleva ir a hacer las compras con largas horas de fila, sino también por la corta oferta de productos ofrecidos.
Por eso es recomendable ir a locales sustentables y realizar compras a granel y así evitar los envases de un solo uso y la utilización de plásticos. La utilización de tuppers o bolsas de tela es clave para este punto.
En caso de hacer las compras en el supermercado se puede optar por productos con envases reciclables o compostables, como así también por aquellas opciones certificadas internacionalmente, siempre evitando el greenwashing.
De esta manera vemos como se puede avanzar hacia hábitos sustentables en los hogares de manera sostenible, práctica y simple sin movernos demasiado. ¿Vos ya incorporaste alguno de estos tips?